Acerca de la RegiónPorto Royal Bridges Hotel
Oporto es uno de los destinos turísticos más antiguos de Europa . La riqueza de su patrimonio artístico, el vino de Oporto, los amplios espacios dedicados al ocio y su vida cultural son solo algunos de los motivos que invitan a visitar la ciudad.
A lo largo del río y del mar la ciudad se desdobla en encantadores paisajes, atractivas terrazas y el placer de disfrutar del aire libre, que los espacios verdes complementan. Pero descubrir Oporto es ir al encuentro de muchas otras sorpresas. Con su carácter hospitalario y tradicional, la ciudad es también contemporánea y creativa y de todo ello son testigos las calles, la arquitectura, los museos, los espacios de ocio, las terrazas y las zonas comerciales, de los espacios más conservadores a los más modernos y exclusivos.
El Centro Histórico de Oporto es Patrimonio Cultural de la Humanidad desde 1996 y su entorno paisajístico y el trazado sinuoso de sus calles le confieren una belleza singular.
En la ciudad el Vino de Oporto está presente de varias formas y sentidos: puede ser conocido y experimentado, pero jamás ignorado u olvidado.
La ciudad es testimonio de una historia hecha del cruce de culturas en sucesivas ocupaciones, varias veces invadida y rodeada, pero que siempre invita a visitarla. Oporto es patrimonio vivo y dinámico, que se regenera y se reinventa, manteniendo siempre su carácter, lo que se fundamenta en su típico granito y por consiguiente una ciudad inquebrantable.
A lo largo del río y del mar la ciudad se desdobla en encantadores paisajes, atractivas terrazas y el placer de disfrutar del aire libre, que los espacios verdes complementan. Pero descubrir Oporto es ir al encuentro de muchas otras sorpresas. Con su carácter hospitalario y tradicional, la ciudad es también contemporánea y creativa y de todo ello son testigos las calles, la arquitectura, los museos, los espacios de ocio, las terrazas y las zonas comerciales, de los espacios más conservadores a los más modernos y exclusivos.
El Centro Histórico de Oporto es Patrimonio Cultural de la Humanidad desde 1996 y su entorno paisajístico y el trazado sinuoso de sus calles le confieren una belleza singular.
En la ciudad el Vino de Oporto está presente de varias formas y sentidos: puede ser conocido y experimentado, pero jamás ignorado u olvidado.
La ciudad es testimonio de una historia hecha del cruce de culturas en sucesivas ocupaciones, varias veces invadida y rodeada, pero que siempre invita a visitarla. Oporto es patrimonio vivo y dinámico, que se regenera y se reinventa, manteniendo siempre su carácter, lo que se fundamenta en su típico granito y por consiguiente una ciudad inquebrantable.